El nuevo auditorio de Pekín invita a las personas interactuar físicamente con el arte

Reportaje-Auditorio-HongKun

25 de Mayo, 2017

Inspirado en obras de los artistas surrealistas Salvador Dalí y Maurits Cornelis Escher, la oficina de arquitectos Penda desarrolló una novedosa propuesta utilizando una dinámica caja de madera con arcos, espejos y escaleras.

Recientemente el estudio de arquitectos Penda finalizó el proyecto para un auditorio de arte al sur de Pekín, en Xi Da Wang Lu, una zona cultural cercana a galerías y museos. Esto se suma al Museo Hongkun de Bellas Artes, que este mismo estudio había terminado anteriormente en 2013.

Con el objetivo de diseñar un espacio de reunión que albergue conferencias, lecturas, pequeñas exposiciones y un área para el comercio de obras de arte, el Desarrollador Residencial y Cultural de Hongkun invitó a este estudio de arquitectos a colaborar con el proyecto.

La idea, además, era conectar al público con los artistas para crear un vínculo directo con el arte. Así, los visitantes entran al auditorio de 270 m2 a un espacio de arte a través de una fachada monolítica. Desde el exterior, esta fachada se refleja en su centro ofreciendo puertas idénticas a través del exterior.

Reportaje-Auditorio-HongKun_2

Para desarrollar este espacio, Penda introdujo una dinámica caja de madera compuesta de arcos y contra-arcos, espejos y escaleras que además de albergar conferencias o actividades, sirve como una gran entrada para guiar a los visitantes al piso inferior.

De esta forma, caminando por el lado izquierdo, las personas llegan a un salón de arte en el primer piso, donde se intercambian pinturas y obras de arte. Además hay un pequeño bar  donde los visitantes pueden reunirse y conversar de manera informal. Por el lado derecho, en tanto, es posible encontrar una escalera lleva al segundo piso a un espacio con oficinas.

Inspirado en obras de los artistas surrealistas Salvador Dalí y Maurits Cornelis Escher, esta construcción sumerge a sus visitantes en un paisaje de arcos de madera y círculos que se reflejan en cada lado y en el techo. Así, el espacio crea una realidad distorsionada y conecta a las personas con el arte de una manera directa e interactiva. En vez de mirar una obra de arte, la gente puede experimentarla físicamente ampliando su imaginación.

Reportaje-Auditorio-HongKun_4

Por otro lado, el uso de arcos y contra-arcos también está presente en el Museo de Bellas Artes de Hongkun, por lo que se genera una concordancia estética y así los arcos presentes en el auditorium invitan al público a entrar en el museo.

“Amamos los arcos como elemento estructural, pero también como gesto de bienvenida y símbolo de entrada que se manifiesta en este proyecto. Con las paredes reflectantes, los arcos pasan de ser un elemento físico a un elemento intangible y conectan entre sí infinitamente. Es un espacio que conecta la realidad con la imaginación”, afirma Penda.

Ver más sobre: 

Compartir en Facebook
Compartir en Twitter
Compartir en LinkedIn
Compartir en Pinterest
Compartir en correo
Traducir »