Obra Casa La Puerta

Casa La Puerta

Arquitecto:Juan Pablo Sepúlveda
Ubicación: Fundo La Puerta, Precordillera de Parral, VII Región, Chile
Superficie: 152 m2
Año: 2015

Ubicada en la Precordillera de Parral y con vista al nevado de Longavi, esta segunda vivienda se emplaza en un campo antiguamente ocupado para la producción de trigo.

El lugar está rodeado de bosques de Hualos, Quillayes y Peumos, con una altura y una leve pendiente que permiten ver la extension del valle central de la Región del Maule.

De familia de arquitectos, el proyecto tiene un valor sentimental por encontrarse en un campo que nos relaciona con nuestra infancia, y es la realización de un anhelo de años por construir una vivienda en un lugar que hemos frecuentado desde siempre.

La casa es un volumen vidriado de 32 metros de largo y 4,5 de ancho. Pensada así para recibir asoleamiento oriente y poniente durante todo el año en todos los dormitorios. La zona del estar y comedor se ubica en el extremo norte, con iluminación natural continua, en el centro los dormitorios y en el extremo sur se emplazan la bodega, los servicios y los estacionamientos.

Por encontrase en un entorno descampado con pocos arboles, se proyectó un gran alero de 2,4 mts de ancho sin pilares, que bordea y da sombra a todo el volumen vidriado. Como en la casa de campo chileno tradicional, bajo el alero se forma un largo espacio intermedio para estar al aire libre, extendiendo la vida interior hacia los potreros.

En el entorno, el campo se recorre a pie y caminando en la amplitud, por esta causa la concepción del proyecto es la continuación de este paso que se atraviesa con la vista, es permeable y transparente en la lejanía y vinculada con la tierra en la cercanía.

El reducido ancho de la casa y los ventanales permiten que la casa sea transparente y se emplace con liviandad en el lugar. Por esto también los dormitorios se separan del pasillo interior y del exterior con cortinas de corredera, las cuales permanecen cerradas para dormir y abiertas durante el día, para no cortar las vistas del lugar.

Para la continuidad de los espacios entre el exterior y el interior, la casa se construye al nivel del terreno, y ambos pavimentos se realizaron de igual manera; hormigón refinado y pintado color tierra.
Durante los meses de primavera y verano, la casa es como una guarida. Iluminada interiormente por los reflejos del pavimento en el cielo y protegida del sol con una sombra oscura y fresca.

En el exterior, una terraza de pavimento de ladrillos para almorzar bajo un grupo de 4 Peumos, y una piscina blanca alejada 25 metros de la casa. Desde ambos lugares se aprecia la casa, y se vive también intensamente la sensación de estar al medio de un campo extenso, con el viento y el sol, y las vistas de la cordillera.



Créditos fotográficos: © Juan Pablo Sepúlveda.

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