Raúl Menjibar Se ha lucido muchas veces logrando que un mensaje permee la sociedad, haciendo que todos terminen conversando de ese tema. Desde contenidos comerciales a otros artísticos, incluso políticos, o una mezcla de todos. Raúl presidió el jurado del Concurso de Diseño de la Semana de la Madera, que terminó el 30 de agosto en la Estación Mapocho.
Concurso al que se presentaron este año 34 diseños.
-Un concurso de diseño tiene a lo menos tres significantes. Uno desde el punto de vista cultural, otro desde el punto de vista artístico y un tercero desde el punto de vista comercial. El cultural es un estímulo para todas las personas que constituimos nuestra cultura, pero también es una expresión de nuestro posicionamiento como país. El artístico habla por sí mismo. Es lo expresivo, lo creativo, lo imaginativo, lo novedoso, lo sorprendente. Mezcla de idea y de expresión. Se dice que Chile es un país de poetas, me encantaría que también se dijera que es un país de artistas y diseñadores. En lo comercial, este concurso trata de incentivar la innovación en los talentos jóvenes. El concurso es un espacio de conocimiento de posibilidades que pueden activar nuevas formas de desarrollo comercial y económico, y obviamente podría ser atractivo para empresarios e inversionistas.
-El diseño de un futuro posible se basa en la realidad actual. El diseño es la capacidad de inventar algo para mejorar nuestra relación con el entorno y el contexto. Es la capacidad de imaginar algo que no existe y que es mejor que lo que conocemos. Así podemos imaginar innumerables temas, todos relacionados con experiencias de vida: cuchillería de madera, plazas interactivas de madera, juguetes de madera, joyas de madera, teléfonos de madera, vajilla de madera, etc. Todo es posible.
-Es una gran oportunidad. La tecnología y la multidisciplina también se aplican al diseño. Estimulación para las edades tempranas, juguetes didácticos para todas las edades, recoger tradiciones con versiones renovadas y diferentes, juguetes decorativos y de ingenio. Jugar con madera es siempre una experiencia lúdica y ancestral, como nuestros antepasados divirtiéndose con palitos del bosque.
-Me gustaría diseñar monstruos infantiles que vivan en los dormitorios de los niños.