26 de Noviembre, 2018

Cómo proteger la madera con aceite de oliva y hongos

Un nuevo estudio muestra que los hongos negros en la madera aceitada pueden comportarse como un bio recubrimiento. Esta capa colorea la madera y la protege de la podredumbre y la luz solar.

Un hongo que no ataca a la madera, sino que la conserva. Suena extraño, pero es posible. De hecho, la científico, Elke van Nieuwenhuijzen, recibió recientemente su doctorado en la Universidad de Tecnología de Eindhoven por un estudio que muestra que hongos negros en madera aceitada se comportan como un bio recubrimiento. Esta da color a la madera y la protege de la podredumbre y la degradación de la luz solar.

El descubrimiento ya había sido realizado hace casi 20 años, por casualidad, por el investigador Michael Sailer, quien estudió si el aceite vegetal podía conservar la madera. Así, descubrió que los pedazos de madera de coníferas impregnados con aceite de linaza y de cáñamo se volvieron negros después de estar expuestos al viento y al clima. La madera desgastada no se volvió suave, como la madera podrida, se mantuvo dura. De esta forma, posiblemente estaba protegida por la capa negra que, a través de un microscopio, demostró ser un hongo.

Elke van Nieuwenhuijzen ha investigado a fondo la composición fúngica natural de estas capas. En el exterior colocó tablones de tres tipos de madera (abeto, pino, ilomba), impregnados con tres tipos de aceite (oliva y dos tipos de linaza). Los hongos se formaron automáticamente y en algunas tablas crearon una capa negra opaca.

El efecto de la capa protectora se debe, de cierta forma, a la decoloración: la capa negra bloquea la luz UV y, por lo tanto, evita la degradación. Van Nieuwenhuijzen también sospecha que, debido a su presencia exuberante, los hongos de color oscuro no dan ninguna posibilidad a los hongos que destruyen la madera. Que el aceite repela el agua, probablemente, es beneficioso para los hongos pigmentados. Luego, el agua se queda en gotas sobre madera, lo que hace que el hongo se desarrolle.

Uno de los hongos que siempre se encontraron fue el género Aureobasidium. Aparentemente crece en todo tipo de condiciones climáticas. Sin embargo, todavía no está claro cómo sobrevive y de qué vive. “Es un hongo enigmático, se desarrolla de muchas maneras diferentes. A veces se comporta como una levadura, a veces forma hilos, a veces se vuelve negro, a veces no”, explica Elke.

La especialista no aconseja a las personas que traten su madera exterior con aceite de oliva. Su investigación se refería a la madera impregnada con aceite. Sin embargo, espera que funcione si el aceite se aplica con un pincel, pero pueden pasar meses, incluso años, antes de que las manchas negras se conviertan en una capa protectora, especialmente en lugares protegidos.


Publicado originalmente por ScienceDaily.

Compartir en Facebook
Compartir en Twitter
Compartir en LinkedIn
Compartir en Pinterest
Compartir en correo
Traducir »