Es una nueva metodología basada en paneles verticales y horizontales prefabricados en madera que posibilitan la mantención de las terminaciones y instalaciones insertas desde fábrica. Además, facilitan que todo panel sea montado en obra y habilitado para su funcionamiento.
La idea de este innovador proyecto nació en la búsqueda de poder solucionar el problema de la utilización de la madera en el rubro inmobiliario el año 2011, época en la Tomás Vera y su equipo buscaban lograr una alta productividad para resolver los problemas de la construcción post-terremoto.
En este proceso de diseño se dieron cuenta que el factor de pérdida que existía en obra era substancial y que ése factor marcaba la diferencia al momento de lograr solucionar el tema de la vivienda inmobiliaria y social en Chile.
Además, notaron que la calidad de la construcción en entramado ligero estaba desprestigiada y desarrollada con materia prima de bajo valor y que las garantías hacia el mundo inmobiliario eran necesarias para poder lograr el cambio de paradigma de la construcción en madera.
Asimismo, notaron que las empresas de sistemas prefabricados no logran incidir sustancialmente en los tiempos y en las pérdidas de los procesos en instalaciones. Esto los llevó a desestimar los sistemas constructivos existentes y buscar una solución propia a la problemática.
El proyecto ganador del primer Torneo de Innovación en Madera se basa en un nuevo sistema constructivo que logra simplificar la cadena de valor de la construcción en obra para el sistema constructivo de paneles en entramado ligero de madera.
El sistema se orienta en una nueva metodología en la construcción de paneles verticales y horizontales prefabricados en madera, la cual posibilita que todo prefabricado pueda mantener terminaciones y instalaciones insertas desde fábrica y con ello, que todo panel sea fácilmente montado en obra y habilitado para su funcionamiento.
De esta forma se disminuyen las pérdidas, las cuales logran índices que varían entre un 28-35% en una construcción tradicional. Este ahorro es traspasado a la calidad de componentes y envolvente, con el fin de poder ser un producto competitivo con otros sistemas constructivos tanto en el mercado nacional como internacional.
“El significado de haber ganado el concurso de innovación es simplemente comprobar que nuestra respuesta ante la problemática de la construcción en madera en Chile va en el camino correcto y es compartida. Es una excelente carta de presentación para nuestra empresa pero además, una responsabilidad que nos impulsa y compromete a mantener buenos resultados en nuestro desarrollo”, agrega Tomás Vera, creador del proyecto.
Este proyecto al ser un startup de un sistema constructivo como empresa AIW SPA está en la búsqueda de asociados y además de haber resultado los ganadores de este torneo, se adjudicaron los fondos regionales de CORFO Bío-bío, los cuales les posibilitarán mejorar como equipo y construir un primer prototipo a escala 1:1 de una vivienda, el cual dará a conocer los parámetros en diferentes tópicos técnicos permitiendo evaluar su productividad.
“Este es un proceso en el cual queremos participar acompañados de asociados estratégicos. Es una meta para nosotros este 2019”, finaliza Vera.
