25 de Febrero, 2022
La diseñadora Melanie Abrantes utilizó restos de corcho y madera de sus antiguos proyectos para crear jarrones, botes y cestas esculturales, todo parte de su colección “Modern California”, influenciados por los colores, las formas y las texturas de la costa de California.
Entre los diseños se encuentran los jarrones Marais, que cuentan con un cuerpo de vidrio alto producido por el vidriero de San Francisco, Jason Stropko Glass. Abrantes usó maquinaria para mezclar su viejo corcho y madera para encajar dentro del recipiente de vidrio, formando el cuello y el borde.
“En cada jarrón de Marais, los materiales (vidrio de colores, corcho y madera dura) se combinan para crear un objeto que es a la vez una escultura de arte y funcional”, indicó. “El corcho y la madera se laminan juntos y se esculpen en un torno de torneado de madera para adaptarse a cada recipiente de vidrio individual”, agregó.
Los portavelas de madera dura de Abrantes se encuentran entre varias de las piezas de la colección que requieren el uso de la maquinaria para definir su forma. También cuenta con frascos grandes, hechos con los mismos materiales.
Abrantes trabajó a mano los jarrones de madera para crear un diseño jaspeado influenciado por el patrón que se encuentra en las flores de los arces. Una mezcla diferente de tonos rosados y morados decoran el “Maple Bud”, que viene en una variedad de tamaños y anchos.
También en la serie está “Bolo”, un bote pequeño y redondeado que consta de dos piezas de corcho que no coinciden y que se separan para permitir el almacenamiento en el interior. Cada cápsula está rematada con una bola de madera que se usa para abrir el artículo. “Explora la silueta lúdica y las formas de un Bolo, la traducción portuguesa de pastel”, dijo el artista. “Cada bote ‘Bolo’ está perfectamente equilibrado para resaltar sus materiales únicos”.
En la colección, el corcho también se utiliza para formar cestas y enfriadores de vino. La cesta redonda tiene un fondo plano y dos asas de cuerda que se unen con cuero, lo que permite transportar la pieza con facilidad. Los enfriadores de vino, por su parte, cuentan con una base de corcho y están rematados con una tira de madera que rodea el objeto, que se puede usar para almacenar botellas de bebidas con elegancia.
Abrantes se unió a una serie de diseñadores que están experimentando con el aprovechamiento de materiales de desecho, como el diseñador madrileño Jorge Penadés, que convirtió el aluminio reciclado de viejas lámparas en nuevos botes. O el proyecto “Scrap Life” de un grupo de diseñadores alemanes que crearon asientos para taburetes a partir de piezas de plástico reciclado.
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