Sebastián Fernández: La madera como factor clave del desarrollo sostenible

El cambio climático dejó de ser un fenómeno hipotético para transformarse en una realidad que nos exige actuar con urgencia. El Panel Intergubernamental Contra el Cambio Climático (IPCC) ha sido explícito en declarar que si la temperatura promedio a nivel mundial supera en 1,5°C los niveles preindustriales, las consecuencias serán catastróficas.

Bajo este escenario, junto a las complejas proyecciones de la ONU respecto al aumento en la población mundial, la cual podría aumentar en 1 billón de habitantes en los próximos 15 años, y alcanzar cerca de los 10 billones de habitantes hacia 2050, es que surge la interrogante sobre cómo podremos alcanzar un futuro en que las necesidades de las personas y las de la naturaleza se satisfagan simultáneamente.  

En ese sentido, la madera aparece como el material para dar respuesta al futuro de la construcción sustentable. Esto, principalmente, porque la obtenida de plantaciones renovables es el único material con gran capacidad de captación de CO2. También porque puede ser utilizada a gran escala, de forma flexible, versátil, además de tener un buen desempeño térmico y sísmico. A esto se suman sus cualidades como la calidez, belleza estética y confort, cumpliendo así con las expectativas y exigencias de la sociedad actual.

Por otra parte, y no menos importante, presenta ventajas como material de construcción en reemplazo de materiales con mayor huella de CO2. Es la materia prima que hoy nos permite contar con productos de necesidad básica (servilletas, pañales), materiales de embalaje (cajas de cartón), muebles y textiles (por nombrar algunos), que son capaces de sustituir plásticos, poliéster u otras materias primas derivadas del petróleo.

Chile, en su calidad de potencia forestal, presenta importantes ventajas para lograr la meta de carbono neutralidad al 2050 y avanzar hacia un modelo basado en una bioeconomía que potencie el desarrollo sostenible del país. Para maximizar estas oportunidades, necesitamos seguir potenciando la investigación aplicada, la innovación y el desarrollo tecnológico, que nos permita seguir desarrollando soluciones basadas en madera, como los ejemplos mencionados anteriormente, para generar una oferta atractiva que responda a los desafíos del futuro. 

En este contexto, tenemos la oportunidad de seguir abriendo nuevos y más espacios de colaboración entre empresas, universidades y centros de investigación que permitan promover la investigación interdisciplinaria en torno a la madera y sus diversos usos, y así avanzar, con más naturaleza, hacia el desarrollo sustentable en nuestro país.