CASA GRILLA

Para realizar este proyecto nos enfocamos en estudiar las necesidades y requerimientos de una familia en particular de la ciudad de Concepción. En el contexto de un barrio donde se ha producido un crecimiento exponencial en torno a la vivienda a lo largo de los años, y que cuenta con una micro radicación muy notoria; dentro del barrio existe una precarización de áreas verdes, espacios de esparcimiento y recreacionales, esto debido a la falta de desarrollo urbano en la zona, situación que se relaciona directamente con la localización del barrio, ya que este se encuentra en la periferia. No obstante, se seleccionó una cuadra en específico a intervenir la cual posee una extensa vegetación con potencial para desarrollar un crecimiento urbano entorno a las personas y los espacios que requieren para desenvolverse.

La familia nos explicó acerca de su dinámica, donde los nietos, sobrinos e hijos que conforman el grupo familiar se trasladan a la ciudad en busca de mejores oportunidades, estudios universitarios, servicios y comercio más activo, entre otros. Por lo que esta familia les abre sus puertas y necesitan a su vez de una expansión en su vivienda, la situación los llevó a evaluar la posibilidad de construir un nuevo hogar en el lote donde viven, el cual cuenta con dimensiones de 20 metros de fondo por 10 de ancho. El emplazamiento del proyecto se genera de forma en que la casa existente se pueda relacionar perceptualmente con la nueva existencia, y también permite la creación de un patio en el interior del lote en el cual se busca que la familia, conviva, comparta y se relacione.

Habiendo entendido e internalizado las necesidades de la familia, se realiza un proyecto donde se decide que el material principal sea la madera, y también que sea algo de carácter modular de manera que puedan generar una construcción parcial de la vivienda dependiendo de los recursos económicos con los que cuenten. El proyecto particular se inscribe en una grilla de 6 metros de ancho por 9 de fondo, generando así módulos de 3 x 3 metros en los cuales se pueda desarrollar algún tipo de actividad con las medidas mínimas para tener un confort humano dentro del espacio.

Se desarrollan paneles de muros ciegos, vistos, como también de suelo, cielo y paneles de vanos como puertas y ventanas. Estos espacios se sitúan dentro de una grilla de pilares y vigas de madera las cuales sostienen y rigidizan la estructura; lo anterior se define de esta manera con el objetivo de que se puedan ir creando nuevos espacios a medida que se necesite. La madera utilizada para pilares y vigas es madera laminada encolada (MLE), esta elección se debe a que el material es resistente y puede cubrir distancias amplias generando de por sí una viga larga o un pilar largo dependiendo de si la vivienda es de 1, 2 o 3 niveles. Los demás materiales son madera cepillada para módulos vistos y madera aserrada para los módulos ciegos, todos los paneles se van uniendo entre sí mediante tornillos y clavos lanceros.

Debido a que no existe ningún espacio dedicado al esparcimiento dentro del barrio, se decide crear un espacio integral y unificador para los locatarios. Afortunadamente, el espacio cuenta con una amplia vegetación preexistente, lo que contribuye a que sea un ambiente armónico e ideal para que todos los habitantes sean parte de este. El espacio posee la cualidad de ser versátil, lo que promueve la realización de diversas actividades, podemos entenderlo como un espacio de juegos para los niños, de descanso y recreación para los adultos, un lugar para realizar reuniones vecinales, un panorama enfocado a la apreciación de la naturaleza, entre otros. Los locatarios poseen la capacidad de ambientar el espacio según la actividad que deseen realizar, lo que lo vuelve un lugar sumamente comunitario y valorado.