Compostura “Se leal a tu desecho”
Código de concursante: DIS977, DIS977
Universidad: Universidad Diego Portales, FAAD, Universidad Diego Portales, FAAD
Equipo: María Gárate Solari, Belén Rebolledo, María Gárate Solari, Belén Rebolledo
Profesor guía: Héctor Novoa, Héctor Novoa
Video (Si aplica): ,
Entendiendo el alarmante escenario chileno en cuanto a producción y manejo de residuos, y observando las calles y basureros de Santiago Centro, nos sorprendió encontrar una alta cantidad de desechos orgánicos. Fue una observación que pareció mínima al principio, pero que luego le otorgó todo el sentido a nuestra propuesta. Notamos que, dentro de las áreas terrosas, en especial alrededor de árboles, se encontraban muchas veces, 1: Colillas de cigarrillos, 2: Cáscaras de plátano y 3: Corontas de manzanas; la primera nos sorprendió mucho como desecho, pero nos pareció una clara evidencia del mal hábito y la poca conciencia del consumidor de tabaco; sin embargo, las segundas nos hicieron reflexionar un poco más allá. Resulta que mucha gente asocia generalmente los residuos de fruta como “buenos para la tierra” por lo cual para algunos transeúntes era bastante lógico y común desecharlos donde encontrasen tierra, es decir alrededor de los árboles. Aquí fue donde encontramos nuestro potencial de diseño. Recopilamos dimensiones de troncos en árboles urbanos de Santiago y aprovechamos este espacio de tierra, que por lo general se encuentra rodeando a cada especie, para generar un contenedor de desecho orgánico, o comúnmente conocido como Compostera, y así invitar al transeúnte a depositar su desecho orgánico junto al árbol, entregando información "personal" acerca de cada especie y de los tipos de desechos orgánicos compatibles. ¿Por qué el énfasis en el desecho orgánico? Porque son los desechos que la naturaleza puede manejar a corto plazo y sin mucho trabajo extra; Porque son producto de nuestro consumo diario, pero debido a nuestro desconocimiento los desechamos en lugares donde más que ser un aporte terminan perjudicando el manejo de residuos, y finalmente con las nuevas tendencias que se masificarán en los próximos años como el Zero Waste, estos serán casi los únicos tipos de desechos que debiéramos generar. Hay que recordar que casi no queda tiempo para que logremos revertir el inminente colapso ambiental que hemos generado en los últimos 100 años. Hoy más que nunca debiéramos discutir y solucionar la forma en la que estamos produciendo, consumiendo y desechando cada día elementos que debieran, luego de cumplir sus ciclos de uso, retornar al lugar del que vinieron, la tierra. Esta “Compostera urbana” funciona por encaje de 6 piezas diferentes; todas fueron fabricadas a partir de una placa y media de madera, cortadas por una máquina Router CNC y posteriormente impermeabilizadas. El total de las piezas fueron pensadas para ensamblarse sin necesidad de pegamento o tornillos, haciendo más sustentable su producción e instalación. Esperamos que este diseño transforme el espacio público en un lugar más habitable, al tomar una postura consciente y colectiva, Entendiendo el alarmante escenario chileno en cuanto a producción y manejo de residuos, y observando las calles y basureros de Santiago Centro, nos sorprendió encontrar una alta cantidad de desechos orgánicos. Fue una observación que pareció mínima al principio, pero que luego le otorgó todo el sentido a nuestra propuesta. Notamos que, dentro de las áreas terrosas, en especial alrededor de árboles, se encontraban muchas veces, 1: Colillas de cigarrillos, 2: Cáscaras de plátano y 3: Corontas de manzanas; la primera nos sorprendió mucho como desecho, pero nos pareció una clara evidencia del mal hábito y la poca conciencia del consumidor de tabaco; sin embargo, las segundas nos hicieron reflexionar un poco más allá. Resulta que mucha gente asocia generalmente los residuos de fruta como “buenos para la tierra” por lo cual para algunos transeúntes era bastante lógico y común desecharlos donde encontrasen tierra, es decir alrededor de los árboles. Aquí fue donde encontramos nuestro potencial de diseño. Recopilamos dimensiones de troncos en árboles urbanos de Santiago y aprovechamos este espacio de tierra, que por lo general se encuentra rodeando a cada especie, para generar un contenedor de desecho orgánico, o comúnmente conocido como Compostera, y así invitar al transeúnte a depositar su desecho orgánico junto al árbol, entregando información "personal" acerca de cada especie y de los tipos de desechos orgánicos compatibles. ¿Por qué el énfasis en el desecho orgánico? Porque son los desechos que la naturaleza puede manejar a corto plazo y sin mucho trabajo extra; Porque son producto de nuestro consumo diario, pero debido a nuestro desconocimiento los desechamos en lugares donde más que ser un aporte terminan perjudicando el manejo de residuos, y finalmente con las nuevas tendencias que se masificarán en los próximos años como el Zero Waste, estos serán casi los únicos tipos de desechos que debiéramos generar. Hay que recordar que casi no queda tiempo para que logremos revertir el inminente colapso ambiental que hemos generado en los últimos 100 años. Hoy más que nunca debiéramos discutir y solucionar la forma en la que estamos produciendo, consumiendo y desechando cada día elementos que debieran, luego de cumplir sus ciclos de uso, retornar al lugar del que vinieron, la tierra. Esta “Compostera urbana” funciona por encaje de 6 piezas diferentes; todas fueron fabricadas a partir de una placa y media de madera, cortadas por una máquina Router CNC y posteriormente impermeabilizadas. El total de las piezas fueron pensadas para ensamblarse sin necesidad de pegamento o tornillos, haciendo más sustentable su producción e instalación. Esperamos que este diseño transforme el espacio público en un lugar más habitable, al tomar una postura consciente y colectiva
GALERÍA DEL PROYECTO
