Entre Cielo y Tierra

Lugar particular e indescifrable. Madera con vida propia que parece intentar ser parte de esta atmósfera compuesta por piezas que no calzan, esquinas que no son esquinas. Y soluciones constructivas improvisadas. Entre Cielo y Tierra se emplaza en la ciudad de Limache, Región de Valparaíso, Chile. Se propone como parte del equipamiento de la Iglesia Evangélica Pentecostal Restauradora. La estructura de madera se posiciona en paralelo al Estero Lliu-lliu o Estero Limache, que alguna vez fue uno de los balnearios más concurridos de la Región de Valparaíso, Chile. Corredor biológico fuertemente afectado por la sequía, que hoy se encuentra totalmente seco. Encontrándose en las periferias de la ciudad, condicionado por este límite territorial y urbano. Desde lo funcional, busca dar espacio a las actividades a realizar por la iglesia, siendo este su principal objetivo. Adicional a esto, se busca impactar la condición territorial en la que se encuentra.

El proyecto se estructura bajo la lógica de colaboración entre todos (Pilares, vigas, diagonales y entablados) los elementos que componen ambas plataformas. Esto a través del diseño, donde a partir de la superposición, y encuentros entre piezas en distintas direcciones, contemplan un equilibrio de fuerzas en los elementos. Gracias a la repetición de elementos en ejes y distintas riostras entre estos, se logra una estructura con un espesor esperado. Cuenta con una plataforma a ochenta centímetros de altura y otra a doscientos noventa. Estas se conectan mediante escaleras, de las cuales una de ellas tiene un importante uso estructural, ya que se encarga de arriostrar ambas estructuras. A su vez, se propone una extensión de pilares compuestos, los cuales llegan a una altura máxima de seis metros, siendo un aspecto clave en el diseño.

Se realiza bajo la utilización de madera aserrada de escuadrías: 4x4" en pilares, 2x2" en barandas y topes, 2x6" y 2x4" en vigas, 2x4" y 1x4" en distintas diagonales y 1x4" en entablados. Además de esto, se sostiene sobre una preexistencia de albañilería compuesta, fundación corrida de hormigón armado, y fundaciones aisladas de hormigón armado. Para contener la exposición al sol y distintas condiciones climáticas, la madera primero fue cubierta por dos capas de aceite de linaza protector de maderas. Para otros elementos estructurales, posteriormente se recubrieron con aceite de carbonileo.

El lugar contempla distintas características, donde predomina la autoconstrucción y el uso de distintos materiales afines a la madera, tales como pallets. De tal manera, la estructura al encontrarse en un contexto como tal, se propone realizar en madera, con el fin de obtener predominancia, volumen, tamaño y calidad material. Se considera la madera como un material vivo, el cual inclusive a través del tiempo puede obtener distintas características.