El incendio de enero del año 2017, que arrasó con la localidad de Santa Olga en Constitución, movilizó a la Fundación Desafío Levantemos Chile para ir en ayuda de las localidades afectadas. Luego del trabajo en terreno asistiendo a los afectados, donde Correa 3 Arquitectos colaboró y participó desde el principio, se coordinó una campaña de recolección de fondos para hacer posible una reconstrucción del pueblo devastado.
Producto del levantamiento de necesidades y requerimientos de los propios habitantes de Santa Olga, se supo que uno de los proyectos emblemáticos era la reposición del Liceo Polivalente de Santa Olga, el cual fue totalmente destruido por el incendio. Con la municipalidad y el gobierno se definió un nuevo emplazamiento para su reconstrucción, ubicado en el sector de Los Aromos.
El proyecto de arquitectura propone una estrategia de cobijo y proceso de aprendizaje, desde las etapas tempranas en el jardín infantil, donde sus tres volúmenes abrazan un patio contenido para el desarrollo de actividades en un patio semi cubierto. Luego el liceo, que propone un proceso educativo secuencial, que va desde lo más protegido y controlado que es el sector de Pre-Kínder, para luego continuar con la básica y media que finalmente remata en el acceso, tiene un gesto de devolverlos formados a la vida adulta, laboral, técnica y/o profesional. Dicho proceso educativo es albergado por tres brazos de salas que amarran y contienen la educación a su interior, desarrollando un espacio cobijado con patios, anfiteatros y áreas verdes para el encuentro e interacción de los alumnos.
La estructura principal del edificio es en base a marcos de madera laminada que se disponen de manera sucesivas, conformando los recintos del proyecto entre marcos, salvando grandes luces de distancia que iban marcando los recintos interiores. Los tabiques internos son estructura de madera aserrada y el revestimiento exterior es un tablero PlayWood con protección de barniz, poro abierto de tipo OSMO. La MLE se protegió principalmente con el diseño de las cubiertas y adicionalmente con Cerastin con tinte.
Sin duda el uso predominante de la madera fue debido a su contexto inmediato dentro de una zona forestal. La materia prima fue extraída directamente de allí hasta los áridos para el hormigón. No era común encontrar proyectos realizados en madera antes del incendio, pero después se masificó el uso en la zona, desarrollando equipamiento, sedes y terminales bajo soluciones constructivas de madera, lo que trajo beneficios en salvar grandes luces, potenciar la extracción local, conocimiento del material, el valor del uso de la madera y por último, ser un referente de la aplicación del material para proyectos educativos.
La obra cumple con los más altos estándares de calidad y sustentabilidad solicitados por el Ministerio de Educación y se enmarca dentro del Plan Nacional de Educación para el 2030, que apuesta a mejorar la educación chilena, incrementando la cobertura con calidad y flexibilidad.
