Refugio Impluvio

Un lugar de alta densidad arbórea de estrato alto, medio y bajo, y una altura promedio de 25 mts. Con esa premisa de alto valor ecológico, se proyectó un espacio a partir de un volumen que recoja la luz natural desde su propia superficie, evitando con esto el despeje de vegetación perimetral. Una planta cuadrada de 11 metros de lado, con un vacío central también cuadrado de 3,5 mts de lado en el centro, abierto al paisaje de árboles, cielo, lluvia, y que reparte luz a todos los recintos, realzando la condición de refugio a partir del interior. La organización de la planta a partir de este centro, se configura en dos alas programáticas. El oriente con los dormitorios, y el poniente con la cocina, comedor y estar, dejando el cuadrante sur como espacio de acceso, y el cuadrante norte como terraza hacia el exterior.

Con el fin de proteger la superficie impermeable de techumbre de roturas y perforaciones que pudieran ocasionarse por la caída de grandes ramas, se definió proteger la cubierta por medio de una terminación de madera que se expone al exterior y que constituye toda la expresión volumétrica del refugio, como una envolvente continua de cubierta y muro, a modo de fuselaje. Así, entre el encamisado de OSB de techumbre y la membrana impermeabilizante que baja desde la cumbrera hasta el nivel inferior de muro de fachada, se colocó una serie de listones cada 40 cm a modo de canales de agua artesanales a favor de la pendiente, los cuales son los encargados de conducir las aguas lluvia desde la cubierta hasta el suelo vegetal, sobre los cuales luego se fijaron transversalmente secciones de madera impregnada y sellada, que luego reciben la terminación vertical de fachada constituida por madera de pino termotratado.

El detalle técnico que resuelve esta “coraza”, tiene distintos grados de exposición a la intemperie. La primera de ella, queda totalmente bajo la membrana impermeable, y para evitar la humedad por condensación se envolvieron cada una de ellas en una barrera de vapor. La sección de madera 2”x2” que va de manera horizontal, es impregnada y va separada de la bajada de aguas en 30 mm. Igualmente por durabilidad se cubrieron en carbolíneo completamente. Por último, la terminación de fachada es de madera termotratada, cepillada para evitar reunir agua en la fibra suelta, en sección de 1”x4” para permitirnos -dada su estabilidad de dimensionamiento- colocar un solo tornillo por cada fijación, además de estar ventilada en sus 4 caras. La ausencia de aleros permite la ventilación y el asoleamiento controlado, en todas sus superficies, asegurando la mantención en el tiempo y la disminución de la acción de agentes bióticos.

Se utilizó madera a partir de las inteligencias constructivas existentes en el lugar, mano de obra carpintera y local. Al mismo tiempo, dada la delicadeza del lugar, la madera como material nos permitía pensar el impacto de la obra construida y su durabilidad, más como huella que como ruina. La terminación continua del revestimiento consolida una expresión monolítica y estática en un volumen que por diseño es simple y elemental. Esta decisión resulta en una compacidad volumétrica rotunda, que subrayando la expresión mono material, define su presencia en medio del bosque como una singularidad silenciosa dentro de toda la información ecosistémica del entorno.