La Escuela Bourdonnières de Nantes, Francia, se convierte en el primer proyecto completado con la línea automatizada de recubrimiento de Stora Enso para madera contralaminada (CLT). Esta línea de producción mejora la protección de la madera masiva contra la humedad, la radiación UV y los insectos.
En el corazón del distrito escolar de Nantes se levanta una escuela que representa el futuro de la construcción sustentable: el colegio Les Bourdonnières, también conocido como École Alice Milliat, se convirtió en el primer establecimiento educativo de Europa construido completamente con el sistema industrializado Plug & Play de Stora Enso. Con una superficie de más de 2.100 m² y capacidad para 230 estudiantes, esta obra marca un hito en sostenibilidad, eficiencia y bienestar para la comunidad escolar.
El proyecto utilizó el sistema Sylva™ by Stora Enso, un kit de construcción en madera compuesto por paneles de CLT (madera contralaminada), LVL (madera microlaminada), escaleras y forjados tipo rib, todos prefabricados y revestidos fuera del sitio. Gracias a su diseño modular y a su ensamblaje rápido, el colegio fue construido en un tiempo récord, con mínimo impacto en el entorno urbano y sin interrumpir las actividades del sector.
Una de las grandes innovaciones de esta escuela es que sus componentes fueron tratados con una capa protectora automatizada en la nueva línea de producción de Stora Enso en Ybbs, Austria. Este revestimiento, aplicado antes del envío a obra, protege la madera de la humedad, los rayos UV y los insectos, asegurando su durabilidad y reduciendo riesgos durante la instalación.
Esta innovadora línea automatizada utiliza recubrimientos acuosos y ecoamigables, diseñados para proteger la madera frente a la humedad, los rayos UV y las plagas, con opciones avanzadas como selladores en los bordes y membranas temporales para exposición prolongada en obra. Estos productos, aplicados antes del envío, no contienen solventes tóxicos ni compuestos orgánicos volátiles, por lo que son seguros para el medio ambiente y para las personas, incluso en entornos sensibles como escuelas, hospitales o viviendas. Su formulación cumple con altos estándares internacionales de sostenibilidad y permite conservar la baja huella de carbono de los elementos de madera. La aplicación mediante robots CNC y secado controlado garantiza una cobertura uniforme, eficiente y duradera, mejorando la calidad final de los componentes prefabricados del sistema Sylva™.
Además de su rapidez constructiva, el diseño priorizó el confort y el bienestar. La fachada incorpora materiales reciclados y aislamiento en fibra de madera de origen biobasado. Los espacios interiores fueron concebidos bajo principios de diseño biofílico, promoviendo una mejor calidad del aire, rendimiento acústico y conexión con la naturaleza, elementos claves para el aprendizaje y la concentración.
La escuela Bourdonnières no solo destaca por su estética moderna y limpia, sino también por su bajo impacto ambiental. Gracias a su estructura en madera, el edificio actúa como un almacén de carbono a largo plazo, alineándose con los objetivos de construcción con bajas emisiones.
Con este proyecto, la empresa demuestra que el futuro de la edificación educativa puede ser industrializado, sustentable y centrado en las personas.