21 de Septiembre, 2017
Presentado recientemente en la Semana de la Madera, el prototipo de una ciclovía hecha con pino y eucaliptus no dejó indiferente a nadie. Y es que su diseño y materialidad son justamente las características que lo hacen único a nivel mundial.
Desarrollado por un equipo de ingenieros y arquitectos de la Universidad del Bío-Bío (UBB), este prototipo sin duda responde a las necesidades de movilidad que actualmente tienen las ciudades, pero también se constituye como una alternativa sustentable, con costos competitivos donde además la pequeña y mediana empresa se puede ver favorecida.
Con el objetivo de que resistiera una carga importante de personas, de viento y sismos, esta ciclovía en altura fue diseñada especialmente para el campus de la UBB, permitiendo, principalmente, la circulación de estudiantes.
Dependiendo del espacio que se tenga, su arquitectura podría variar pudiendo ser emplazada en un parque, un humedal o en el borde costero. Y su acceso podría ser a través de una escala o de una rampla.
Con 1,20 metros de ancho en cada dirección, este prototipo hecho principalmente por piezas de madera contralaminada (CLT) de eucaliptus nitens de tres capas y de pino radiata, cumple con todos los estándares exigidos internacionalmente, siendo así más ancha que las ciclovías actuales en el país, lo que sin duda brinda la seguridad necesaria a quienes la utilicen.
Sumado a esto tiene pendientes para evacuar el agua y un piso con ranuras, aumentando la fricción con las ruedas, siendo imposible que se acumule agua y evitando así que los ciclistas puedan resbalar si llueve. Esto la hace bastante adaptable a diversos entornos naturales. Pero además su innovación viene de la mano de la manufactura de sus componentes.
“Uno de los aportes del proyecto es justamente desde la innovación en la madera. Esto porque la estructura principal, pórticos transversales y longitudinales, son piezas compuestas en base a madera aserrada, refuerzos con tornillos y uniones con herrajería metálica”, afirma Franco Benedetti, uno de los ingenieros que participaron en el proyecto.
La ciclovía fue construida en base a piezas sencillas aportadas por la empresa CMPC Maderas, conectores de SimpsonStrong-Tie, protección en base a productos de Lonzaquimetal, que es posible encontrar fácilmente en el mercado, sin la utilización de ningún tipo de pegamento.
“La condición menos tradicional es que toda la estructura está armada en base a piezas de madera que están agrupadas. No hay elementos de madera laminada, no hay elementos de manufactura costosa”, explica Benedetti.
Así este proyecto promueve el desarrollo de la pequeña industria, favoreciendo la prefabricación y el trabajo que realizan las pymes, quienes podrían proveer los elementos para levantarla.
“No es el producto, es la ingeniería, es la arquitectura, es el diseño. Estamos hablando de la industria de servicios. La agregación de valor va hacia la Pyme, que va a poder mejorar sus ventas, sus ingresos, en función de elementos como éste”, enfatiza Víctor Rosales otro de los ingenieros que participaron en el desarrollo del prototipo.
Y justamente al favorecer la prefabricación, los tiempos de construcción serán menores reduciendo así los costos. Pero además, al estar hecha de un material noble y renovable, también significa un menor impacto al medioambiente.
Por otro lado, la madera de eucaliptus nitens termo tratada tiene una serie de propiedades en sí misma, es muy estable dimensionalmente y tiene protección propia contra hongos y mohos. “El CLT de eucaliptus nitens es más denso y tiene mejores propiedades mecánicas, presenta mejores estados de rigidez con respecto al pino radiata”, explica Rosales.
Además hay una serie de tratamientos y procesos que permiten dar al CLT mayor durabilidad, buen rendimiento y comportamiento, sobre todo al ser expuesta a la intemperie. Así en este caso la madera de eucaliptus fue termotratada y cubierta con una membrana asfáltica, lo que permite que el agua sea eliminada de la estructura, promoviendo los conceptos de protección por diseño en las estructuras en base a madera, que la Universidad del BíoBío ha impulsado desde el año 2001.
En el caso del pino radiata, también se le adicionaron tecnologías ya que fue tratada con CCB (cobre, cromo, boro) para protegerla incluso del fuego.
Esta iniciativa contó con el apoyo del Convenio de Desempeño de Apoyo a la Innovación en Educación Superior, CD InES MINEDUC-UBB logrado por la Universidad del Bío-Bío, y que tiene como propósito aumentar significativamente la innovación basada en la producción científica de la universidad con el objetivo de lograr su competitividad internacional.
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