La marca Wijld está decidida a cambiar la industria de la moda con ropa hecha de madera, respetuosa con el medio ambiente, de fabricación local y justa. Pero además aseguran que sus prendas son extremadamente suaves, que regulan la temperatura, tienen propiedades antibacterianas y se mantienen frescas por más tiempo.
Hablar de “ropa de madera” puede sonar gracioso y hasta “áspero” cuando uno se la imagina, pero lo cierto es que la marca europea Wijld ha desarrollado camisas, camisetas sin mangas, con mangas largas y hasta chalecos que en realidad son muy suaves y frescos.
Esta sería una de las principales novedades de esta ropa hecha de madera, un tejido que destaca por ser suave al tacto y favorecer la piel en lugar de irritarla. “En definitiva, hay menos fricción sobre la piel, por lo que la ropa de madera se lleva como una segunda piel”, afirman desde Wijld.
Es más. Según un estudio realizado por el Hospital Universitario de Heidelberg, más del 80% de los participantes afirmaron que el uso de fibras de madera mejoraba considerablemente el aspecto de su piel y los convenció de sus propiedades sensoriales y termorreguladoras.
Y es que percibir un tejido como “agradable” no sólo se debe a la sensación táctil sino también al clima de la piel. “El grado en que los tejidos regulan la temperatura tiene una gran influencia en lo cómodos que nos sentimos”, aseguran en Wijld. “En verano o durante el estrés físico, nuestra temperatura corporal aumenta y con ella la producción de sudor. El cuerpo se enfría mediante la evaporación del sudor en la superficie de la piel. De esta forma, durante un esfuerzo intenso, las personas pueden perder hasta 1,8 litros por hora. Por lo tanto, la exigencia de los textiles cercanos al cuerpo es garantizar un transporte rápido de agua para favorecer el efecto refrescante del propio cuerpo. Por ello, los factores decisivos son una alta capacidad de absorción de agua y una alta velocidad de aspiración”, explican.
Aquí es donde la ropa hecha de madera destaca. Su capacidad de agua y su tasa de absorción de agua son mucho mayores que el algodón o el poliéster. En números, la capacidad máxima de absorción de las fibras de madera en 20 segundos es de un impresionante 380%, mientras que para el algodón y el poliéster es sólo de 16-19%.
De esta forma, la nanoestructura de las fibras de madera garantiza que la humedad se transporte y absorba rápidamente dentro de la fibra, contribuyendo así a la termorregulación al permitir una evaporación óptima en la superficie del tejido mediante una distribución homogénea del líquido.
El comportamiento de secado de la fibra de madera también puede competir con el de las fibras convencionales. Aunque mucha gente cree que los tejidos de poliéster se secan más rápido que otros, no hay diferencia en la cinética de secado entre las fibras de poliéster y de madera si se supone que el tejido tiene la misma cantidad de humedad. También hay que mencionar que las fibras de poliéster son cerradas y, por tanto, no pueden absorber la humedad, es decir, la humedad sólo permanece en la superficie.
Las fibras de la madera tienen propiedades termofisiológicas muy especiales proporcionando un excelente aislamiento térmico en épocas de frío. Al mismo tiempo, el sudor se disipa del cuerpo durante el calor o el estrés físico y se libera al medio ambiente para favorecer de forma óptima la refrigeración del cuerpo.
La resistencia a los olores es otra de las impresionantes ventajas de la ropa de madera. En nuestra piel hay numerosos microorganismos que son importantes para nuestra flora cutánea. Cuando sudamos, los microorganismos se multiplican debido a la humedad, comienzan a actuar y, en consecuencia, se desarrolla el olor a sudor. Al entrar en contacto con la piel, el sudor y las bacterias entran naturalmente en el tejido. A veces resulta extremadamente complicado eliminar estos olores de los textiles, especialmente en ropa deportiva fabricada con tejidos de poliéster.
El tejido de la ropa de madera se mantiene fresco por más tiempo ya que inhibe el crecimiento de bacterias. Si se compara con los materiales sintéticos, el algodón y la fibra de madera, se observa que los materiales sintéticos tienen un crecimiento bacteriano de 100 a 1000 veces más fuerte. Pero con el algodón, el crecimiento sigue siendo 10 veces mayor que en el tejido de madera.
La razón de esto es que en otras fibras el agua permanece en la superficie, donde es totalmente accesible para las bacterias. En el caso de las fibras de madera, por el contrario, el agua se absorbe casi por completo en la fibra, lo que elimina el medio de cultivo de las bacterias. Las bacterias también tienen menos capacidad de adherirse a la superficie lisa de la fibra de madera que las fibras sintéticas o el algodón.
Debido a que la fibra de madera puede eliminar mejor la humedad, las bacterias se ven privadas de los nutrientes necesarios y se inhibe el crecimiento bacteriano. Las propiedades antibacterianas especiales de la fibra de madera hacen que la camiseta de madera se mantenga fresca durante más tiempo. Por lo tanto, este tipo de prendas se pueden usar por más tiempo sin tener que preocuparse por los olores desagradables.
Esto es lo que dice la ciencia y las nuevas tecnologías en relación a los textiles en base a madera. Ahora, sólo queda experimentar en primera persona y disfrutar de sus beneficios.
