Comunidad a 4 escalas: Vivienda de apoyo a la mujer

 

Según diversos estudios realizados por distintas instituciones del país, en Santiago se concentra el mayor numero de mujeres violentadas tanto física como verbalmente y mujeres cuidadoras que se ven afectadas negativamente con esa labor, en la mayoría de los casos tienden a entrar en cuadros depresivos o ansiosos dificultando su desarrollo personal como persona activa dentro de la sociedad, es por esto que existe la necesidad de brindar espacios seguros para familias vulneradas, donde los integrantes de estas puedan desarrollarse personalmente y en comunidad. Con un enfoque particular en las mujeres pertenecientes a estas familias, se brindan oportunidades y espacios que mejoren su calidad de vida, a menudo comprometida por falta de tiempo para ellas mismas. El proyecto se basa en viviendas transitorias con espacios comunes a diversas escalas, y se implementa mediante un sistema de arriendo que permite a las familias ahorrar durante su estancia.

La propuesta consiste en un edificio de viviendas que incorpora la prefabricación de piezas de CLT estructurales; muros exteriores del edificio, muros perimetrales de la vivienda y un primer piso de hormigón armado, con un vacío central, rodeado de la circulación. La configuración espacial de las unidades de vivienda en el perímetro de cada nivel genera espacios comunes de diversas dimensiones y escalas, en adición a las áreas comunes del primer nivel. Las áreas de interacción son de gran importancia para el desarrollo de las mujeres que los habitarán, además de brindar oportunidades de aprendizaje y espacios para el emprendimiento.

El proyecto nace a partir de la necesidad de otorgar nuevos espacios para mujeres vulneradas y violentadas en diferentes escenarios y ambientes de la vida cotidiana. Esto puede deberse a una mirada estructurada de los roles de género de la sociedad, donde las mujeres deben ejercer labores de cuidado, tareas domésticas, entre otros, dejando de lado el desarrollo personal debido a la falta de espacios y tiempo para ellas mismas.   De esta manera, se busca entregar herramientas a partir de la construcción de viviendas sociales transitorias enfocadas en la mujer en las cuales puedan volver a desarrollarse y surgir a través de diferentes espacios destinados para el emprendimiento y cuidado hacia terceros. Esto se logra a través de un sistema de arriendo a precio justo, que permita a sus habitantes ahorrar durante su permanencia para poder surgir a través del apoyo del proyecto. Además, se fomenta el desarrollo en comunidad con otras mujeres y familias en situaciones similares, brindándole ayuda y compañía entre todas quienes vivan en la vivienda.

El proyecto se emplaza entre los límites de la comuna de Santiago Centro y Quinta Normal, ambas dentro del ranking de las comunas con las cifras más altas por denuncias de mujeres violentadas. El terreno cuenta con una gran superficie para la construcción de viviendas además de una alta conectividad y centralidad para sus habitantes, cercano a parques y espacios para la recreación tanto para adultos, jóvenes y niños. De esta manera la localización de las viviendas permite un mayor flujo de conectividad hacia el resto de la ciudad, siendo un punto clave para el bienestar de sus habitantes. La propuesta programática del proyecto responde a espacios y servicios que promuevan el desarrollo de las mujeres del proyecto. Espacios como la guardería brindan apoyo directo a las labores de cuidado de las madres, como así también las Dark Kitchens presentan una oportunidad de emprender junto con otras mujeres de la comunidad. Las salas multiuso del primer nivel permiten desarrollar variedad de actividades que ayuden al desarrollo personal de las mujeres y el encuentro entre familias.

El edificio se construye a partir de piezas prefabricadas de CLT, material que permite libertad en fabricación de piezas y versatilidad de usos, optimizando tiempos de armado y costos. Se utilizan losas y muros estructurales de CLT que permiten darle forma al proyecto a través del soporte y la delimitación de la parte interior y exterior del proyecto. Además, los límites de las viviendas se construyen con una serie de piezas del mismo material al igual que sus divisiones interiores. Se aprovecha la madera como material principal del proyecto, teniendo consciencia de los tiempos de armado, mano de obra y medioambiente.

La propuesta se centra en dos materiales, madera y hormigón armado. Por un lado, está el primer nivel a base de pilares, vigas y muros de hormigón armado, sobre una base de este mismo material, haciendo que el proyecto pueda ser adaptable a cualquier terreno. Y por otra parte esta las piezas prefabricadas de CLT, las que podrían resumirse en tres esenciales; Muros exteriores estructurales correspondiente a cada una de las cuatro fachadas del edificio con perforaciones que permiten la entrada de luz, estas últimas actúan como, balcones y terrazas. Las segundas serían los Muros interiores estructurales, estos delimitan el perímetro de las viviendas y solo tienen una perforación para la puerta. Y la tercera las Losas de CLT. Ambas piezas se consideran como grandes muros con aberturas y hombros para afirmar y reforzar las losas, todo esto se posa sobre el primer nivel de hormigón abarcando los 4 pisos de vivienda. Debido a las cualidades del material y su transporte, cada muro está formado por piezas de 10,8 metros de altura x 2 metros de ancho, debido a la modularidad de las viviendas, los recintos varían su tamaño en números pares partiendo de los 2 metros. Además, arquitectónicamente el proyecto posee una planta base que se modifica en cada nivel de viviendas, rotando o aplicando simetría para lograr variedad en la configuración de viviendas y patios, pero manteniendo una fachada ordenada. Esta variedad se logra apreciar a través del vacío central y la circulación, logrando generar conexiones entre vecinos y entre espacios comunes y privados.