Las compras desde casa han aumentado considerablemente con el transcurso de la pandemia, y lo seguirán haciendo. Ante esta acción lo que queda en otro plano es la entrega de paquetes. Cada vez hay más servicios de reparto y más personas repartiendo. Estos paquetes se recepcionan, trasladan y entregan día a día en todo el Gran Concepción. En vista de lo expuesto, se observa la necesidad de lugares que agilicen este proceso y puedan suplir la falta de espacios y las necesidades básicas de las personas que se hacen cargo de estos paquetes, los repartidores. Considerando su descanso, espera, colación, uso de baño y la reparación de sus vehículos.
La tecnología ha permitido nuevas formas de almacenamiento, así como de optimización de espacio, tiempo y movimiento de objetos. Es por esto que toma relevancia el traslado de paquetes, de forma coordinada a distintas escalas urbanas y comunales.
Por consiguiente se propone una red de Estaciones de Logística y Repartidores, ubicadas en puntos estratégicos de la comuna de Concepción. Una ELR (Estación de logística y repartidores) es un punto de intercambio de paquetes, al mismo tiempo es un espacio que permite cubrir las necesidades de los repartidores para cumplir con sus labores.
Para definir la red de estaciones, se escogieron puntos de ubicación de acuerdo a un estudio realizado sobre el tiempo de traslado desde y hacia un punto concurrido por repartidores, velando que tenga un recorrido inferior a 15 minutos en bicicleta. Otra variable que rigió la ubicación de cada estación fue el valor por metro cuadrado de cada punto en la ciudad, optando por lugares que bordean el centro de la ciudad.
Uno de los puntos de la red y donde se emplaza la propuesta, es en el sector Collao. Este fue seleccionado por su cualidad de “corredor urbano” y su conexión con una gasolinera, ya que permite generar una conexión programática con la estación en el primer nivel, complementando la funcionalidad del proyecto.
El proyecto reúne cuatro tipos de espacios que contienen actividades distintas: el almacenamiento, compuesto de un sistema robotizado, que permite una mayor eficacia y precisión al momento de guardar y repartir paquetes; oficinas, que son utilizadas a modo de co-working para el repartidor que necesite trabajar; espacios sociales, los cuales permiten que pueda crear vínculos y lazos con otros repartidores, al mismo tiempo que pueda suplir sus necesidades básicas; y un último espacio, el cual corresponde al mantenimiento, el cual permite a los repartidores realizar reparaciones de baja complejidad en sus vehículos.
Se genera un contraste entre lo que ocurre en el primer piso respecto del segundo, donde el primer piso está destinado en su mayoría al tránsito de vehículos, en cambio el segundo piso está destinado al repartidor, permitiendo que desarrolle actividades sociales.
Para el almacenamiento y entrega de paquetes se considera la llegada de un furgón de una empresa postal, entregando encomiendas a una máquina, la cual procesa y almacena los paquetes en su interior, quedando expuestos en la fachada del proyecto. La entrega se realiza mediante la petición, por parte de un repartidor o persona que desee retirar una encomienda, a la máquina de salida de paquetes.
Visualmente, y dentro de la volumetría, el espacio más jerárquico del proyecto es el almacenamiento, por ser el elemento que destaca por la innovación en sistemas robotizados de almacenamiento, al mismo tiempo por la estructura en madera del proyecto, lo que permite generar una resignificación del uso del material. Por ser un servicio que se presta al público y lo atractivo del constante movimiento de paquetes, se busca su exposición.
Este proyecto está pensado para ser utilizado por una multiplicidad de personas a la semana, por lo que la aplicación de la madera a nivel estructural permitiría dar a conocer las capacidades que tiene dicho material. Además, la ubicación escogida se vincula con una gran avenida de alto tráfico, de esta manera, el de tener un espacio de almacenamiento cuyo foco es mostrar los paquetes almacenados permite exponer las virtudes de la madera. La innovación y el desafío de este proyecto es la presencia de grandes luces estructuradas netamente en madera. En síntesis, la aplicación de este material permite el desarrollo de una nueva forma de entender la construcción en madera por parte de los peatones.
