12 de Diciembre, 2022
José Manuel Cabrero Ballarín es Doctor en Arquitectura y académico titular del Departamento de Construcción, Instalaciones y Estructuras de la Universidad de Navarra, en España. Su trabajo principal gira en torno a la Cátedra de Madera Onesta, con labores tanto de docencia como de investigación.
Si bien realizó su tesis doctoral sobre uniones estructurales semirrígidas en estructuras de acero, fue en su estancia postdoctoral en la Technische Universität Dresden (Alemania), entre los años 2007 y 2008, donde él profundizó en el estudio de la madera. Tras su reincorporación a la Universidad de Navarra, comienza a liderar una nueva línea de investigación sobre dicho material.
El docente también realiza una intensa actividad divulgativa, la que resulta fundamental para expandir el conocimiento sobre este recurso en España, tanto para el público especializado como el general, más allá del académico. Su trabajo como asesor del gobierno de Navarra, siendo exponente destacado de diversos congresos nacionales e internacionales, además de un participante activo de publicaciones en revistas científicas, lo ubican como una figura reconocida a nivel internacional.
José Manuel Cabrero participó como jurado en la última edición del Concurso de Ingeniería y Construcción organizado por Madera21, donde destacó muy positivamente la alta profesionalidad de los trabajos presentados.
–En su variada actividad que compagina docencia, investigación y divulgación, como miembro de distintas instituciones, ¿podría relatarnos cuál es su trabajo actual en torno a la madera aplicada a la arquitectura?
–Mi trabajo principal gira en torno a mi docencia e investigación dentro de la actividad de la Cátedra Madera Onesta en la Universidad de Navarra. Allí imparto asignaturas relacionadas con diseño estructural, en las que evidentemente la construcción con madera está presente junto con el resto de materiales. Además, anualmente organizo un seminario internacional de Construcción con Madera para alumnos de la escuela. Este seminario, de una semana de duración, cuenta con un profesor invitado y los alumnos desarrollan propuestas constructivas bajo la guía de éste y otros académicos.
Desde hace unos años, yo participo en el grupo de trabajo de Uniones del Eurocódigo 5 (CEN TC250/SC5/WG5), el que está compuesto por expertos de todos los países de la Unión Europea. Se encarga de desarrollar y consensuar el desarrollo normativo de la norma de diseño de estructuras de madera a nivel europeo. Junto con eso, soy miembro del Management Committee en la Acción COST CA20139, centrada en el diseño holístico de edificios de madera en altura. Y por último, también soy miembro de la red CYTED para industrialización y digitalización de la industria de la construcción en madera (RIDICM), en la que participan universidades y empresas de toda Iberoamérica.
–También mantiene una intensa labor divulgativa sobre la construcción en madera, participando en diversas publicaciones periódicas dedicadas al tema. ¿De qué manera Ud. valora la labor de la divulgación para fomentar el uso y conocimiento del material?
–La divulgación sobre construcción con madera es fundamental. Aunque se trata de un material profundamente ligado a nuestra tradición constructiva, en casi todos los países fue sustituida en la modernidad por el acero y el hormigón. Y por ello, el conocimiento asociado a ella se fue perdiendo. Es necesario recuperar esta tradición y conocimiento del material y su manejo. Para ello, a falta de que se incorpore de un modo más intenso en la formación de nuestros profesionales, las acciones de divulgación son fundamentales y necesarias. Por ejemplo, desde los comienzos de la Cátedra Madera, siempre hemos tratado de tener regularmente conferencias y seminarios abiertos al público, de modo que el conocimiento no se quede solo dentro de la universidad, y el resto de la sociedad sea partícipe del mismo.
–Hoy en día la preocupación por el medioambiente y los efectos de la construcción en el mismo, son temas que cada vez se tienen más en cuenta en la industria, en las empresas, entre los arquitectos y el público en general. En su opinión, ¿de qué manera el uso de la madera podría colaborar en el desarrollo de una arquitectura sustentable?
–La madera es un material excepcional. Es superior a muchos de los materiales hechos por el hombre. Es uno diseñado con precisión por su naturaleza para resistir cargas estructurales. Esa es su mejor carta de naturaleza, con su garantía de sustentabilidad. Es un recurso natural, valioso y que debemos tratar con respeto. La madera contribuye no solo a edificios más sostenibles, sino a bosques más cuidados y con mejor salud. Ponerla en valor también lo hace con nuestros bosques y los ecosistemas relacionados con ellos. Como decía un viejo profesor: “los bosques no desaparecerán si tienen valor”. La construcción con madera es un modo de que tengan valor y de que permanezcan.
Además, hay otros muchos aspectos, como la importancia de la madera como sumidero de carbono. Los árboles absorben el dióxido de carbono en su crecimiento y lo almacenan en la madera. Si se usa, se retrasa la devolución de este carbono a la atmósfera. Para ello, el uso de esta materia en construcciones permanentes es fundamental y puede contribuir a ello.
–Según su experiencia como investigador en sistemas constructivos y estructuras realizadas en madera, nos interesaría conocer sus reflexiones generales con respecto al estado de la construcción con este material actualmente en el mundo.
–Estamos asistiendo a un renacer de la construcción con madera. En gran parte, al menos en Europa, este renacer viene muy de la mano de un producto, el panel contralaminado, que ha popularizado la construcción con madera, y con el que se han elaborado ejemplos representativos, que han tenido gran difusión en el ámbito profesional. Países como España, en los que la construcción con madera estaba relegada a un segundo plano, hoy ven cómo comienzan a proponerse y construirse de modo cada vez más habitual con esta materia prima.
A nivel de investigación y desarrollo normativo, ámbitos en los que colaboro, cada vez es más habitual el intercambio de procedimientos y conocimientos a nivel mundial, con lo que el conocimiento se está homogeneizando. Aunque cada país tiene sus técnicas y tradiciones constructivas propias, los procedimientos y métodos de diseño son cada vez más comunes, y basados en una experiencia común.
–Chile es un país con tradición maderera,la que se deja ver tanto en la arquitectura vernácula como en la contemporánea. ¿Cómo ve la situación actual de la arquitectura desarrollada en dicho material en nuestro país?
–Chile goza de una muy buena salud a nivel de arquitectura. Existen arquitectos chilenos muy conocidos, respetados y valorados a nivel mundial. Dentro del ámbito de la madera, en el pasado he estudiado y escrito artículos sobre la obra en madera de Cazú Zegers y Smiljan Radic. Los dos tienen una potente obra de gran interés, en la que la madera es protagonista.
–En el 2011 impulsó la creación, dentro de la Universidad de Navarra y con apoyo del gobierno regional, de la Cátedra Madera Onesta. Durante estos más de 10 años de trayectoria, ¿qué podría destacarnos en cuanto al trabajo desarrollado por la misma?
–Desde siempre, en la cátedra se ha trabajado paralelamente en tres aspectos: formación, investigación y divulgación. En el aspecto de la formación, lo más representativo fue comenzar un “germen” de docencia de construcción con madera que, de modo orgánico y autónomo, ha ido creciendo, de modo que, en muchos aspectos de la formación de nuestros estudiantes, la madera ya ha sido asumida como un material más.
En cuanto a la investigación, nos hemos centrado principalmente en el diseño y análisis de uniones estructurales de madera. En estos años hemos desarrollado dos tesis doctorales, y tenemos otras tres en desarrollo. Los resultados obtenidos por nuestro equipo nos han permitido ser llamados para colaborar en el Eurocódigo.
Y con respecto a la difusión, quizá lo más significativo ha sido la llamada de la asociación Fórum Holzbau para colaborar con ellos en la organización de la edición española de “Fórum Construcción con Madera”. Gracias a ellos, ahora es un evento que ha saltado los formatos regionales y al que asisten profesionales de toda España.
–Este año usted participó como jurado en la última edición del Concurso de Ingeniería y Construcción, organizado por Madera21. ¿Cómo valora el nivel de los proyectos presentados?
–Los proyectos presentados me causaron muy buena sensación. Eran trabajos rigurosos, de gran calidad. En muchos casos, los resultados eran muy interesantes y valiosos. Aunque se trataba de trabajos de fin de máster, muchos de ellos tenían un nivel profesional muy elevado. Es muy motivador encontrar jóvenes tan bien preparados, y con tanta ilusión. El futuro de la construcción con madera está en buenas manos.
Ver más sobre: