Obra-Casa-DoblesY-1

Casa Doble Y

Arquitecto: Sebastián Irarrázaval
Colaboradores: Macarena Burdiles, Alicia Argüeles
Ingeniero Estructural: Felipe Cardemil
Construcción: Jorge Ibacache
Superficie construida: 350 m2
Ubicación: Colico, Chile
Año de construcción: 2016

Los objetivos principales de la casa son dos. En primer lugar, que integre el bosque en la experiencia cotidiana del usuario, y en segundo lugar, que reciba tanta luz y sol como sea posible durante todo el día.

Para ese propósito, el programa considera un diagrama de letras 2Y que crea no sólo orientaciones dobles para la entrada del sol en diferentes momentos del día, sino que también expone al habitante a las vistas que lo rodean.

En otras palabras, el perímetro muy extendido de la casa y sus bifurcaciones, en oposición a una organización compacta, potencian la experiencia de estar, no frente a la exterioridad, sino dentro de ella. Más específicamente, de estar entre el sol y los árboles en una relación parietal.

Además, esta forma también hizo posible encajar en los árboles existentes sin tener que limpiar el sitio.

En cuanto a la materialización del proyecto, la madera fue elegida no sólo porque es un material local que podría anclar la casa al lugar por su vinculación con lo natural y lo cultural, sino también porque las estructuras de madera, en oposición con otro tipo de conjuntos materiales, se construyen naturalmente utilizando infinitos elementos lineales que, como resultado, se asemejan al sentido de infinito que está presente en los bosques y podrían entrar en una especie de vibración con el exterior.

En lo que se refiere a la relación con el suelo, el mencionado diagrama 2Y negocia la pendiente de diferentes maneras. A veces subraya y descansa sobre el suelo y otras contrasta con el suelo, subrayando la artificialidad del cuerpo arquitectónico.

Con respecto al tratamiento exterior de la piel, el objetivo era crear una vibración constante con el exterior en su mayoría verde que, como es bien sabido, se puede conseguir usando un color rojo.


Fotógrafo: ©Felipe Díaz Contardo

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