Situada en la larga península de Graswarder, perteneciente al balneario báltico de Heiligenhafen, se trata de una extensa reserva natural de aves privilegiada tanto para especialistas como ornitólogos como para el público turistas y otros viajeros.
Con el objetivo de observar a los pájaros en este ambiente impoluto sin molestarlos, los directores de la reserva de aves querían erigir una torre de observación apropiada que, gracias a su situación elevada, pudiera proporcionar una vista excepcionalmente buena del área completa y que permitiera a los visitantes estudiar los detalles con la ayuda de un telescopio.
La resultante construcción de madera, realizada con una mezcla de alerce siberiano, se integra perfectamente en el ambiente natural que la rodea. Construida como una escultura de vigas y salientes con soportes diagonales, representa la estilizada figura de un pájaro sentado. Una escalera de dos tramos proporciona acceso a los 15 metros de altura de la torre que, con su estación de observación acristalada, puede acomodar fácilmente a grandes grupos de visitantes.
Escrito originalmente para GMP Architekten
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