22 de Agosto, 2016
Promete ser más biodegradable que el plástico, más resistente y aislante que el vidrio. Proviene de un recurso renovable y su producción en escalas industriales a bajo costo es perfectamente posible. Se trata de la “madera transparente”, un innovador material que hizo noticia este año debido a dos investigaciones que se publicaron con apenas dos meses de diferencia.
La primera lo hizo en marzo, en la revista académica Biomacromolecules de la Sociedad de Química Americana; la otra salió a la luz pública en mayo, en la edición online de la revista Advanced Materials. En el primer caso se trataba de un equipo de investigadores del KTH Royal Institute of Technology de Estocolmo, y en el segundo, eran científicos del Departamento de Ciencia de materiales e Ingeniería de la Universidad de Maryland.
¿Qué tienen en común? Ambos se dedicaron a experimentar con la lignina, un componente de las paredes celulares vegetales responsable de la rigidez de los tallos y de la corteza de los árboles. Y descubrieron que, al eliminar químicamente este componente, la madera se volvía blanca, por lo que luego decidieron inyectarle un polímero transparente a nivel nanométrico que reemplazara a la lignina. Esto consiguió que el material aumentara hasta seis veces su resistencia inicial y adquiriera un nivel de transparencia de 85%.
Debido a que el material no es completamente traslúcido, esta innovación podría usarse para fabricar ventanas que permitan que la luz entre pero al mismo tiempo mantener la privacidad del hogar. En la construcción de casas y edificios, por otra parte, tiene el potencial para mejorar la iluminación interior a través de las paredes disminuyendo así los costos asociados a la luz artificial.
También es útil para la elaboración de paneles solares ya que captura la luz y aumenta la eficiencia energética. Asimismo, “puede tener aplicaciones que reemplacen potencialmente al vidrio y algunos materiales ópticos”, afirma Liangbing Hu, de la Universidad de Maryland.
La principal limitación para los investigadores de Maryland, no obstante, es el tamaño, pues hasta ahora sólo han podido convertir madera transparente de cinco pulgadas por un centímetro de espesor. En el KTH Royal Institute of Technology, en tanto, trabajan para mejorar la transparencia del material y ampliar las clases de madera utilizables para producirlo. Aseguran, sin embargo, que están listos para venderlo a gran escala.
Ambos concuerdan, eso sí, en que el principal atractivo de la “madera transparente” es que proviene de un recurso renovable, que además ofrece excelentes propiedades mecánicas como la resistencia, tenacidad, baja densidad y baja conductividad térmica.
Ver más sobre: