10 de Marzo, 2021
Los proyectos Workmood y Thompson están diseñados por Made Studio y por el diseñador industrial español Mario Ruiz, respectivamente. Se trata de dos nuevas familias que se integran al catálogo de piezas de artesanía de Mad Lab, una editora de objetos decorativos radicada en España que busca la utilidad, el significado y también el alma en cada una de sus obras.
El primer proyecto trata sobre los fundamentos de la construcción, mientras que el segundo, sobre las icónicas edificaciones que se pueden conocer en varios distritos de Nueva York. Por ello no sorprende que ambas colecciones lleven nombres en inglés y que distribuyan sus elementos como otroras escenas del cine y la televisión de los años 50 y 60, con grúas y maquinarias elevando tierra y materiales, o construcciones de mediana altura que actúan como fieles interpretaciones de antaño.
Si bien su propuesta tiene amplios y diferentes diseños, esta vez la inspiración vino desde rubros tradicionales como la construcción y la arquitectura, pero con la intención de un viaje a mundos minúsculos y presentes en gran parte del ideario colectivo. Es ahí donde la madera jugó un rol trascendental, al dar textura y fraternidad a dichas intenciones gracias a las oportunidades que brinda.
Esta última idea la continúa Mar López, una de las fundadoras de Mad Lab junto a Antonio Serrano: “La madera tiene ilimitadas formas de interpretarse, sólo hay que ver la historia que conocemos de los artilugios, artefactos, herramientas y mobiliario hecho por el hombre a lo largo de toda la historia conocida. Además, hoy en día existe un mejor aprovechamiento del material y de los residuos que se reciclan”.
En ese sentido, Workmood ocupó madera de nogal, la que se combinó con el aluminio macizo que sostiene los elementos que asimilan materiales de construcción. Thompson, por su lado, también empleó nogal en conjunto con otras variantes como cerezo, castaño, roble y arce, aportando tonos y dimensiones con una minuciosidad carpintera eminente.
“Actualmente estamos sacando varios proyectos que han sido concebidos desde antes de la pandemia y los desarrollados por Made Studio y Mario Ruiz son parte de estos, por lo que tienen gran mérito dadas las condiciones. En Mad Lab utilizamos todo tipo de madera que esté bajo la clasificación FSC, es decir, de bosque sostenible, por lo que tenemos ejemplares de Europa, América e incluso de África. Con esto, combinamos una alta tecnología CNC con sistemas tradicionales y artesanos de elaboración de la madera y sus procesos, lo que hace que el producto final sea de una indiscutible calidad”, indica López.
El minimalismo de Workmood muestra grandes armatostes de la era industrial, como las maquinarias y las grúas de construcción, en pequeñas formas y diseños que las vuelven cercanas y propias como nunca antes. Es así como sus piezas “Tower-crane”, “Rollertrack”, “Mixer”, “Forklift” y “Excavator”, llevan a que estos componentes presentes en las ciudades, comúnmente imponentes y ruidosos, hoy se puedan contemplar en pequeños espacios con calma y silencio.
En una entrevista explicaron que esta colección se sustentaba como “una oda al universo de la creación desde su perspectiva más visceral”. “Workmood es un ejercicio de atenuación de estos elementos, de considerarlos constructivos y no destructivos, convirtiéndolos en seres deseables y que conectan con nuestro interior”, indicó Mad Lab.
El homenaje de Thompson, por su lado, se centra en los edificios de ladrillo y de piedra que componen las grandes manzanas de Nueva York, mayormente construidos en principios del siglo XX y que hoy se mantienen como emblemas de quizás una de las urbes más influenciadas por la renovación vial y urbana en el mundo.
La colección en sí se compone de cinco de estos, cada uno con distintos diseños y tamaños, como emulando viajes a la deriva entre avenidas principales y secundarias de dicha ciudad. Fue elaborada por el destacado diseñador Mario Ruiz, Premio Nacional de Diseño 2016 en España y uno de los referentes ibéricos a la hora de hablar de objetos útiles, prácticos, con traspaso emocional y embellecedores del ambiente. Con más de 20 años de trayectoria, el autor ha exhibido sus obras por gran parte de los rincones europeos y ha recibido más de 40 premios internacionales de renombre, como Design Plus, Red Dot Desing Award, IF o Neocon, entre otros.
Es así como ambas colecciones han pasado a formar parte del catálogo web de Mad Lab, que hoy cuenta con trabajos de ocho diseñadores de prestigio europeo, 11 categorías de colecciones y un sistema de compra online disponible para todo el mundo. Desde 2015, con un cambio estratégico que puso el foco en la elaboración de productos de pequeña escala que surgieran de la memoria propia y se adaptaran al siglo XXI, han surgido colaboraciones con diseñadores y arquitectos como Mario Ruiz, Eli Gutiérrez, Borja García, Héctor Serrano, Alberto Marcos, Vicent Martínez, Sohei Arao y Antonio Serrano, para ir definiendo la línea editorial que es hoy en día Mad Lab: la actual colección “Objetos de la Memoria”.
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