9 de Mayo, 2022
Hamaika: la silla de madera que se ensambla en menos de media hora
“Quería transmitir lo que siento al crear un objeto”, asevera el diseñador español Unai Rollan, inventor de Hamaika, una silla compuesta de once piezas de madera que se autoensamblan y que propicia que las personas, en especial los niños, aprendan conceptos introductorios de construcción de muebles.
Hamaika —vocablo vasco que significa “once”— es un “objeto funcional” que se puede armar en menos de treinta minutos. Para esto, el diseñador se inspiró en la propuesta de Enzo Mari, la “Autoprogettazione”. Un auto-proyecto que facilita su manufactura con sólo un martillo y clavos.
La silla, cuyas piezas son uniformes en apariencia, fue confeccionada en madera ligera de pino para economizar el proceso de producción. “Cuando hay límites para acceder a procesos costosos, esto saca el mejor diseño de nosotros”, complementa Rollan. Además, asegura que este tipo de mobiliario favorece el involucramiento de los usuarios en el montaje. “La fase final del proceso es la que genera ese sentimiento de participación y satisfacción de haber creado un objeto. En este sentido, Hamaika mejora la experiencia al tocar y trabajar con el material”.
Swish: la silla de “madera programada” que encandila a los diseñadores
En 2017, el estudio de arquitectura Carlo Ratti Associati presentó Swish, una silla de madera plegable que se amolda a diversas formas predeterminadas y que es bosquejada con métodos de diseño y fabricación digitales.
Este prototipo, perfeccionado junto al fabricante italiano de mobiliarios Cassina, fue exhibido en la Semana del Diseño de Milán a raíz del nonagésimo aniversario de la marca Cassina 9.0. En ese contexto, se expusieron cuatro versiones de Swish: tres en madera de cerezo y una en olmo.
Carlo Ratti enfatiza que este producto funge como la culminación de una investigación exhaustiva, ya que “comenzamos a trabajar en auto-ensamblaje y en programación implícita hace unos años, es decir, en la posibilidad de que un objeto asuma configuraciones cinéticas de manera predeterminada”. Esta silla fue fabricada con 27 piezas de madera con bordes redondeados, acopladas a partir de un sistema de diseño de uniones y bisagras que permite que el asiento se articule en distintas posiciones. Swish, cuyas piezas fueron pulidas en una máquina de control numérico (CNC), se sustenta en el diseño paramétrico. Gracias al empleo de diversos software de modelado, es plausible adecuar, progresivamente, algunos parámetros espaciales para obtener la forma esperada.
Desde Corea, bancos de madera que se enraízan y ramifican
En 2018, en el Parque Hangang de Seúl, el arquitecto coreano Yong Ju Lee instaló un mueble colosal, en forma circular, de 30 metros de diámetro. Aquel “banco de raíces”, como lo denominó, se extiende en el terreno tal como si fuesen las raíces de un árbol. De este modo, permite que los visitantes se apoyen, se sienten o se recuesten sobre sus “ramas”, las cuales ascienden.
Esta estructura, cubierta con una plataforma de madera, se sostiene gracias a un marco de metal con bases de hormigón. El banco se confeccionó con tres tipos de muebles, dispuestos en diferentes alturas: una silla para niños, una para adultos y una mesa. Esta composición ha conllevado a que los usuarios intervengan la forma que deseen, sea individual o colectivamente.
Yong Ju Lee expuso este proyecto en la competencia de arte Hangang. Para su propuesta empleó un algoritmo informático que determinó la geometría tridimensional de esta imponente banca.
Tripp Trapp: la silla ergonómica que se adecúa al crecimiento de los niños
Implementada por la empresa noruega Stokke, esta silla —de diseño sencillo, dúctil y ergonómico— posee la excepcional capacidad de transmutar su forma para adaptarse a las fases de crecimiento de los niños. El asiento cuenta con una base segura que habilita al infante a levantarse para tomar lo que requiera de la mesa.
En los últimos años se han fabricado alrededor de 10 millones de unidades. Esta exitosa silla fue concebida, según relata el creador de Tripp Trapp, Peter Opsvik, en los almuerzos familiares. Él observó que la mesa era inalcanzable para su hijo de dos años, cuyos pies no tocaban el suelo. Así, se dificultaba el contacto visual con sus padres y se limitaba su autonomía.
Stokke ha pretendido renovar su colección, utilizando madera de roble blanco y negro, y aplicando laca mate, que ennoblece la calidad de la estructura. Además, se añadieron detalles en acero y oro rosa con acabados metálicos. Esta silla fue seleccionada por el Museo de Arte Moderno de Nueva York para coronar la exposición “Century of the Child: Growing by design, 1900-2000”, siendo galardonada como diseño icónico.
Electron: armada como un rompecabezas y sin herramientas complejas
Ideada por los diseñadores Konstantin Achkov y Deyan Georgiev, la silla Electron, perteneciente a la compañía búlgara Lock Furniture, emergió como un nuevo paradigma en muebles de paquete plano. Ésta fusiona diseño artístico, ergonomía e ingeniería innovadora.
Cada componente está fabricado de una hoja de madera contrachapada de haya de 18 mm, cortada con un enrutador CNC. Las piezas, originales en cuanto a la configuración, se ensamblan como un rompecabezas, prescindiendo de tornillos o clavos. Por otro lado, la madera está recubierta con aceite de teca y protegida contra la radiación ultravioleta.
El diseño de esta silla se cimenta en la geometría de la estructura, que debe resistir un cierto peso y presión, transmitiendo belleza, armonía y comodidad.
Filla: inspirada en la forma de las hojas y en los añosos anillos de la madera
En colaboración con la empresa italiana de asientos Very Wood, el arquitecto Michele De Lucchi creó Filla. Una silla en madera de fresno natural o teñida, con respaldo dividido que emula la apariencia de las hojas, mientras que los bordes redondeados aluden a los anillos de crecimiento anual de los árboles.
El autor explica la etimología de su silla. “Filla es, simplemente, la abreviatura de clorofila, ¡y clorofila significa hoja! En griego, chloros significa verde y phýllon significa hoja. La clorofila es un pigmento natural asombroso que es vital para la fotosíntesis y para purificar el aire que respiramos”.
Tras años de esfuerzos e inspirado por la naturaleza, De Lucchi se concentró en una meticulosa precisión tecnológica. Como ha recalcado siempre, Filla nació de una profunda cavilación y pasión por el más noble de los materiales: la madera.
Mudra: el cruce de listones de lenga como sistema constructivo
Basada en las posturas de entrelazado de los dedos, tanto de la meditación budista como del yoga hinduista, la Silla Mudra está diseñada por medio del cruce de listones de madera como sistema constructivo. A través de la modulación y el ensamble de sus piezas, su diseño busca dar con la mayor funcionalidad y comodidad para el usuario desde el carácter antropométrico.
Realizada por AnKa Taller, su confección es por medio de la madera de lenga. Una proveniente del sur de Chile, también reconocida como el “cerezo de la Tierra del Fuego”, que ofrece múltiples tonalidades de amarillo, rosado y gris en un mismo listón, junto con variadas opciones de vetas, colores y texturas.
“La silla, como objeto derivado del acto de sentarse, propone una enorme cantidad de variables, que van desde la materialidad hasta el ángulo del respaldo o la altura”, dice su autor, Sebastián Kaczorowski, quien asegura que su modelo es semiduro, de muy fino acabado y altamente resistente a la humedad.
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